Parque Nacional Picos de Europa (León, Asturias y Cantabria)
Día 1, 07/10/21
Ocho pasajeros en una furgoneta, risas y complicidades se fraguan tras nuestras primeras 24 horas de convivencia. La gastronomía asturiana nos tiene locos; demasiado abundante para nuestra capacidad, aunque eso nos proporciona momentos muy divertidos.
Hoy hemos realizado el primer muestreo de macroinvertebrados, guiadas por las monitoras que cuidadosamente nos enseñaron el protocolo. Parece complejo, pero creo que e unos días podremos con ellos solos.
También por la tarde hemos tenido una interesantísima actividad con un ganadero de la zona, que nos ha hecho ver la gestión desde otra perspectiva muy diferente a la que conocemos, hasta hacernos plantearnos algunas ideas. El debate ha sido interesante y didáctico, entrando en temas de comercio local, gestión de grandes mamífero como el lobo y ganadería extensiva.
Día 2, 08/10/2021
Hoy hemos salido muy ilusionados a conocer la Fundación Quebrantahuesos y deseado tener suerte y ver uno de estos increíbles animales. Hemos aprendido como se lleva a cabo el proceso de cría y reintroducción en Picos de Europa. No esperábamos que estos animales fuesen complejos, pero sin duda son interesantes. Así, hemos aprendido términos como “filopatria”, o la tendencia a querer permanecer en el sitio en el que nace el animal. Lo que ocurre es que estas aves nacen donde hay actualmente población establecida, en Pirineos, por lo que desde pequeños se trasladan a Picos y se les cría “con vistas a Picos de Europa”. Hemos tenido además una experiencia única al llevar comida al muladar de buitres, en el que dos voluntarios han sido afortunados en ver estas aves muy cerca. Lo interesante de esta parte del proyecto es que esas crías que ya en esta época sobrevuelan Picos de Europa, vean y aprendan de los otros buitres (negro y leonado) donde pueden encontrar comida (en su caso los huesos dejados por otros buitres)
Los técnicos de la FQH nos explican la cría de Quebrantahuesos
Después de comernos unos bocatas junto al río Duje, hemos realizado dos muestreos en el río Duje antes de que se pusiera el sol. El equipo de vadeadores de hoy han sido geniales y han batido un record. Estamos orgullosos de ellos, pero se ha abierto un competición…en la que las jueces (monitoras) no son poco exigentes.
Hemos querido añadir una salida nocturna después de cenar en busca de algún anfibio, aunque finalmente fueron quirópteros y lepidópteros nocturnos.
Día 3, 09/10/2021
Tras duros minutos de debate decidiendo si ir de excursión o visitar una quesería artesanal, optamos por lo mejor: hacer ambas cosas. Así, elegimos una ruta más cortita, durante la mañana, pero no por ello menos sorprendente. Desde el Valle del río Duje ascendimos hasta el Collado de Pandébano, donde alcanzamos la maravillosa postal del Uriellu o Naranjo de Bulnes, localización de ensueño. En una pradera pacífica con el rebaño de vacas que siempre acompaña a Picos de Europa, comimos y pasamos un rato.
A la vuelta, fuimos directos a una de las queserías que abren sus puertas en Arenas de Cabrales, donde nos explicaron el proceso para conseguir el famosísimo queso de Cabrales. Aunque queda fuera de nuestras capacidades, fue una lección interesante.
Después de probarlos, marchamos hasta nuevo destino en León: el Valle de Valdeón. Por el camino entramos en un duelo de Furor, en el que dos equipos de, bastante afinados, voluntarios intentaron ganar entre canciones de todas las épocas y géneros imaginables, incluidas las inventadas por el grupo
Día 4, 10/10/2021
Hoy hemos visitado el Centro de interpretación de Oseja de Sajambre, un sitio muy didáctico recién inaugurado. Allí nos recibió Segundo, quien nos explicó muchos datos interesantes sobre el parque nacional. Luego realizamos el primer muestreo del río Sella, y fuimos a comer a un mesón de la zona.
Por la tarde realizamos el segundo muestreo del río Sella y completamos el día preparando la futura actividad de educación ambiental en un colegio, que realizaremos en los próximos días.
Día 5, 11/10/2021
Hoy tuvimos que tomarnos un desayuno bien calentito porque ha hecho una mañanita fresca…Con el sol saliendo sobre la orilla, nos hemos metido a muestrear al río Sella. Una muestra especialmente sucia de sedimentos, pero rica en biodiversidad. A continuación, ha empezado un día libre, así que nos hemos ido de ruta de nuevo.
Tras una caminata desde Soto de Sajambre en la que ya vamos haciendo más migas entre todos llegamos, atravesando un hayedo-robledal en pleno otoño, al Refugio de Vegabaño justo a tiempo de la comida. Nos acogieron con mucha amabilidad y disfrutamos de las vistas que nos ofrecía el entorno.
Después de una pequeña siesta en el prado cercano al refugio, allí mismo seguimos preparando y organizando todos juntos la actividad de educación ambiental que tendría lugar dos días después. Con mucha pena y junto con el sol, nos dispusimos a volver a Soto de Sajambre, para poner vuelta al albergue.
Día 6, 12/10/2021
Tras varios días de voluntariado llegó el momento, o uno de los momentos más duros: tres muestreos en un mismo día, todos ellos en el río Cares. Primero comenzamos con energía, dispuestos a afrontar la frialdad y dureza del río. Sin embargo, conforme íbamos entrando en el agua, las risas iban disminuyendo…5ºC nos esperaban.
Seguidamente, nos movimos al siguiente punto de muestreo, donde ya las risas y el jolgorio volvieron a reinar en el ambiente.
Finalmente, tuvo lugar el último muestreo y al regresar al albergue nos pusimos manos a la obra para terminar las diferentes actividades que habíamos diseñado y que realizaríamos el miércoles con los niños de la escuela del pueblo.
Día 7, 13/10/2021
Las primeras luces del alba bañaron de amanecer el Valle de Valdeón. Los músculos seguían entumecidos de las temperaturas a las que nos vimos sometidos durante los muestreos en el río; el Cares salió caro. Sin embargo, las energías estaban al máximo de su capacidad, íbamos a enseñarle un nuevo mundo a los pequeños habitantes de este precioso enclave. Una vez en el aula, preparamos una serie de actividades lúdico-educativas. En ellas, los infantes debían arrastrarse, saltar y esquivar obstáculos, cuales animales en su entorno.
La experiencia nos resulto muy positiva, ver un colegio tan especial en el cual solo hay 10 alumnos repartido en dos grupos, fue muy enriquecedora.
Tras comer una variada carta de productos locales, la sherpa Mar nos recibió con madera de avellano en mano y, a ritmo de rebeco, nos guió por la senda que seguían los paisanos antaño para defenderse de un enemigo común: el lobo. Así, conocimos el Chorco de los Lobos, toda una estrategia comunal. La ruta, que se vislumbraba corta y un paseo soñoliento, resultó de gran interés cultural y natural, teniendo la oportunidad de ver una marta a plena luz del día.
Hoy fue la última cena en El Tombo y nos pusieron arroz para variar. Después de una hora de creatividad diseñando stickers de la crew, nos decidimos a emprender nuestra ultima ruta nocturna en este precioso paraje. A pesar de muchas bajas, 3 intrépidos voluntarios nos adentramos en el abrigo de la noche en busca de sus misteriosos habitantes. Pasados unos 30 minutos llegamos a un enclave en el cual la luna se reflejaba en un lado de las montañas del cañón, alumbrando todo aquel territorio que no se encontrase dentro del bosque mixto. En aquella ubicación, con pequeños parches de avellano, escuchamos los crujidos y movimientos de al menos 3 animales que lamentablemente no pudimos identificar. Para una grata sorpresa de los aguerridos voluntarios de esta incursión, un zorro muy curioso nos esperaba en el camino de vuelta mostrándonos toda su belleza al sonido de la brisa nocturna del Valle del Cares. La luna se escondía tras las montañas en un cielo estrellado, y el bosque entonaba su preciosa melodía, esperando al borde de un nuevo día.
Día 8, 14/10/2021
Un día más nos levantamos temprano para el desayuno y, como siempre, unos llegaban antes que otros, pero este no era un amanecer cualquiera; se trataba del ultimo desayuno en ese valle que tanto nos había dado. Tocaba correr para preparar las mochilas y zarpamos hacia el Valle del Deva a los mandos de Ana. Es un camino sinuoso, estrecho y frío, llegando a datar los 4ºC bajo cero que, muy probablemente, señalaron la mínima estatal. Fue un trayecto precioso donde apreciamos que, en los sucesivos valles por donde discurrimos, el otoño se presentó unas fechas antes que en el que fue nuestro hogar en Valdeón. ¡Qué policromía! Esas montañas nos susurran que volvamos algún día, quien sabe si igual de bien acompañados.
Llegamos directamente al punto de muestreo, en el río Deva. Tramo angosto, donde se respira un aroma diferente. Quizá la nostalgia empiece a hacernos mella y cada bocanada parece ser la última. Comemos en un pueblo cercano, donde algunos voluntarios aprovechan la ocasión para obsequiar a sus seres queridos con algún detalle del Parque Nacional del que tanto hemos aprendido. En el ultimo punto de muestreo se siente un aroma más distendido y además nos aguardaba una sorpresa final. El tramo finalizaba en una gran poza donde, incluso, podías tener la roca como techo.
El cansancio era grande, pero nos guiaban las ganas de subir a Fuente Dé. La imagen de sus montañas verticales hizo que nos sintiéramos completamente insignificantes. Unos trepan hacia el antiguo teleférico y otros remontan la ladera. Finalmente, todos nos asomamos a la misma donde, por sorpresa, dos ciervas nos permiten fotografiarlas y disfrutarlas. Buena recompensa tras tanta búsqueda.
Día 9, 15/10/2021
.....Seis pasajeros en una furgoneta vuelven a casa, en sus ultimas horas de convivencia. Aún quedan risas, canciones e historias que contar...
